lunes, 1 de diciembre de 2014

'Relatos salvajes' | Damián Szifrón

Humor perverso en frasco pequeño


Creo que la película Relatos salvajes no podía tener un título más ajustado por escueto y descriptivo. Damián Szifrón dirige, en efecto, seis relatos salvajes, con tramas independientes entre sí, pero con elementos comunes como el tema de la venganza, la dudosa rectitud moral de los protagonistas y un perverso tono cómico.


Ricardo Darín en Relatos salvajes.

La posibilidad de un asesinato, el descubrimiento de una infidelidad en el momento menos oportuno, el hartazgo contra la arbitrariedad de la burocracia... Las situaciones en las que se encuentran los personajes parten de lo cotidiano (un coche que adelanta, una multa de tráfico) pero se expanden hacia actitudes violentas cuando deciden tomarse la justicia por su mano o moldearla para su propio beneficio.

Érica Rivas en Relatos salvajes.

De los seis episodios que componen la cinta, hay unos que funcionan mejor que otros, hay personajes cuyas motivaciones y reacciones pueden parecer más o menos verosímiles, pero el conjunto convence porque es coherente. Todas las historias muestran a personas corrientes en situaciones límite para ellos y el director pone el foco en lo desmesurado de sus respuestas, en el conflicto interno sobre si vengarse o no, en el delicado punto en el que uno decide entre obviar la afrenta o pasar al contraataque.

Estos relatos merecen el calificativo de salvajes por las bestialidades que cometen los personajes para afrontar los problemas, pero también porque tienen inyectado un humor hipernegro, a veces macabro. Es un sentimiento a medio camino entre el espanto por la sangre fría de psicópatas en potencia y el absurdo de las reacciones tan desproporcionadas por parte de gente que podrían ser nuestros vecinos.

Rita Cortese en Relatos salvajes.

En el material promocional, Ricardo Darín aparece como reclamo en la primera posición del elenco, aunque cuantitativa y cualitativamente es tan protagonista como el resto de actores dentro de sus respectivos relatos. Todas las interpretaciones resultan creíbles, pero me gustaría destacar a Rita Cortese: es brutal su papel de cocinera que propone echar matarratas en la comida como si fuera lo más normal del mundo, ¡y que además se preocupa de si la fecha de caducidad influye en la rapidez de los efectos!


Quizá la obra de Szifrón puede hacerse larga porque implica ver seis inicios, seis desarrollos y seis clímax distintos de seguido. En realidad, Relatos salvajes es una colección de cortometrajes con un tema y un tono común, y ya que son pequeñas píldoras de comedia negra, podría ser más adecuado tomarlas por separado o con más distancia entre sí, sin la continuidad que exige presentarlas como largometraje.

Pero esta pega formal es muy pequeña si se compara con el resultado tan divertido: cuentos descabellados que despiertan tanto perplejidad hacia los comportamientos exhibidos en pantalla como fascinación por averiguar hasta dónde están dispuestos a llegar los personajes. Y con carcajada de regalo.

Relatos salvajes (Argentina-España, 2014). Dir.: Damián Szifrón. Int.: Ricardo Darín, Leonardo Sbaraglia, Érica Rivas, Darío Grandinetti. 
Web oficial: http://www.relatos-salvajes.com/

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