'Venirse arriba' | Borja Cobeaga y Diego San José

¿Qué hace mi padre borracho en mi Erasmus?

La visita sorpresa de un padre sin idea de inglés, un país en el que se puede fumar marihuana, fiestas locas y una novieta amante de Eurovisión. ¿Qué más puede pedir Miguel, estudiante de Erasmus en Ámsterdam? Borja Cobeaga y Diego San José, guionistas del taquillazo cinematográfico español Ocho apellidos vascos, presentan en la novela Venirse arriba una sucesión de escenas cómicas con doble trasfondo sentimental: amoroso y paterno-filial.


Los ingredientes mencionados se mezclan de la siguiente forma: Miguel es un estudiante asturiano que pretende conquistar a la francesa y eurovisiva Marion durante su estancia becada en la capital de Países Bajos, mientras su novia oficial lo espera en su pueblo, Mieres, sin saber nada. Todo se complica cuando de forma inesperada llega Jesús Miguel, su padre, fanfarrón, en paro y trastornado por su divorcio. Padre e hijo deben convivir en un piso compartido con un joven de alta actividad sexual.

De entrada, el punto de partida de Venirse arriba es atractivo si lo que se quiere es pasar un buen rato. Y lo consigue. Este libro, que se lee en un par de tardes, contiene suficientes momentos delirantes como para divertir y arrancar alguna carcajada. En particular, aquellos que explotan la vergüenza de Miguel ante las salidas de tono de su padre, y la forma que tiene Jesús Miguel de desenvolverse en un país extranjero echándole morro. Nos reconocemos en los personajes porque, de una forma u otra, todos hemos vivido alguna situación similar.

Venirse arriba se sostiene en sus diálogos vivos y fluidos, que buscan generalmente la broma a partir de la brecha generacional entre padre e hijo. Por eso es fácil imaginarse este libro como una película, con un inicio que engancha, un desarrollo plagado de situaciones ocurrentes y un final redentor y muy emocional. No en vano, recordemos que sus autores, Borja Cobeaga y Diego San José, son artífices del mayor éxito en cine español de humor en mucho tiempo.

Probablemente concebida para arrastrar el éxito de Ocho apellidos vascos, esta novela no es (ni lo pretende) una obra cumbre de la literatura, pero cumple el fin que se ha propuesto: dejar una sonrisa al pasar la última página. Enternecedora y amable, Venirse arriba retrata los conflictos de un joven que empieza a descubrir el mundo y quiere hacerse adulto, y de un adulto que aspira a recuperar el tiempo perdido y volverse joven. 

Venirse arriba (2014), de Borja Cobeaga y Diego San José. 304 páginas. Está publicado por Planeta.

Puedes leer las primeras páginas aquí.

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