'En un lugar sin ley' | David Lowery

El motor del fugitivo enamorado

Más de una vez se me erizó el vello viendo En un lugar sin ley, película dirigida por David Lowery. Con una trama situada en Texas en los años setenta, los protagonistas son dos fugitivos, Bob y Ruth, que tienen una relación sentimental. Cercados en una vieja casa por la policía, Ruth (interpretada por Rooney Mara) hiere de un disparo a uno de los agentes, pero Bob (Casey Affleck) asume la culpa para ir él a la cárcel en lugar de su pareja, que está embarazada. Años después, y tras escribirles cartas todos los días, se fuga de prisión para buscar a las dos mujeres de su vida: Ruth y Sylvie, su hija.

Rooney Mara en En un lugar sin ley.

La historia se complica debido a los riesgos que corre Bob en su huida, a la gente que no quiere que el delincuente se acerque a la nueva y formal vida de su amada y al galanteo de Patrick (Ben Foster), el policía herido que, ya recuperado, trata de ganarse a Ruth y a la niña.  

En un lugar sin ley es un intenso western romántico (que no pasteloso), ejemplo del mejor cine independiente: preciosos planos largos de paisajes, silencios que dicen mucho, una narración pausada y frescura. Es cierto que la trama en algún momento da por entendidos puntos que no lo están tanto, por lo menos para mí. Pero el resultado global es el de una historia de amor, entre épica y trágica, que poco a poco se va hundiendo bajo la piel.

Casey Affleck en En un lugar sin ley.

A pesar de que los protagonistas son bandidos, es fácil identificarse con ellos porque se muestra su lado más humano. No delinquen por maldad, sino como medio de supervivencia. Además, los vemos en sus momentos más tiernos, en particular una escena en la que papá Bob canta a su bebé, todavía en la barriga de mamá Ruth. Son sinceros y resisten en un mundo hostil. Las muestras de afecto contrastan con la dureza propia del paisaje del western (grandes extensiones desiertas, colores apagados) y con la violencia con la que se topa Bob, un hombre en fuga con demasiados enemigos.

El director David Lowery demuestra tener mano para explorar con sinceridad los sentimientos de quien busca y de quien espera. Sufrí en el cine cuando parecía que la relación entre Bob y Ruth caía en la fragilidad, y me conmoví cuando el caradura simpático que es Bob demostraba que actuaba movido por el motor más potente del mundo, de su mundo, de su pequeña familia.  

Que nadie espere una historia azucarada, sino intimista y contradictoria, sin buenos ni malos ni personajes que se lamentan. En un lugar sin ley comienza con un tiro a un policía y se convierte en un disparo al corazón que despeja las dudas sobre si el deseo de ver a la persona amada es suficiente razón para superar todos los obstáculos.

En un lugar sin ley (Ain't Them Bodies Saint) (EE.UU., 2013). Dir.: David Lowery. Int.: Casey Affleck, Rooney Mara, Ben Foster, Keith Carradine.

Página web oficial (en inglés): http://www.aintthembodiessaints.com