martes, 15 de septiembre de 2015

'El desierto de los Tártaros' | Dino Buzzati

La valentía y la espera


Una fortaleza aislada en medio de la nada como metáfora del recorrido vital. Es el escenario donde transcurre El desierto de los Tártaros, la maravillosa (lo digo desde el principio) novela del escritor italiano Dino Buzzati. Tras una trama de apariencia militar protagonizada por el joven soldado Giovanni Drogo, se esconde toda una lección de escritura, de profundidad, de vida y de muerte.


El argumento de la novela es simple: Giovanni Drogo, recién ascendido a oficial, es destinado a la fortaleza Bastiani, un lugar recóndito situado entre montañas y en plena frontera con el misterioso Norte. Allí tendrá el honor de combatir una hipotética invasión del país vecino. Sin embargo, la esperada batalla parece no llegar nunca, el tiempo pasa y tanto Drogo como sus compañeros se dedican a esperar y esperar, mientras se obsesionan con la vaga esperanza de que llegue el ataque nórdico para salir de su letargo y mostrar su heroicidad.

Decía que se trata de una trama simple porque los personajes simplemente aguardan el ataque tártaro, consumen su tiempo mirando hacia la planicie por la que esperan que los invasores lleguen. Solo viven para demostrar su valentía en esa batalla cuyo inicio se dilata en el tiempo. Ocurren algunos acontecimientos que añaden tensión a la lectura, pero el grueso de El desierto de los Tártaros se centra en la evolución de los pensamientos y los sentimientos de Drogo, que ve cómo pasan los años mientras se debate entre el arrepentimiento de haberse quedado en la fortaleza y la excitación por esa gloriosa lucha que estallará en cualquier momento.

Dino Buzzati emplea en la novela un estilo de escritura limpio, una prosa sencilla y bella, con una forma pausada de narrar y delicadeza en las descripciones tanto del imponente paisaje como de los estados de ánimo por los que pasa Giovanni Drogo. Las rutinas militares se alternan con diálogos que tienden a sugerir más que lo que dicen de forma expresa, y que muestran la camaradería y el tedio entre los hombres de la fortaleza Bastiani.


Lo mejor de El desierto de los Tártaros, además de lo hermoso de la escritura y de lo fácil que es empatizar con el protagonista, es el profundo nivel reflexivo que alcanza el autor sin necesidad de recurrir a artificios ni grandilocuencias. Las meditaciones más trascendentales acerca del individuo, del sentido de la vida y de la muerte se formulan en este libro con un lenguaje llano, valiéndose de una trama sencilla y un personaje transparente.


Lo que sucede en la fortaleza Bastiani es una metáfora de la misma vida, una reflexión acerca del periplo vital del ser humano. En su sencillez, rica en interpretaciones, esta obra de Dino Buzzati lleva al lector a preguntarse si la verdadera valentía reside en pelear contra un ejército enemigo o en enfrentarnos a nuestros fantasmas en la intimidad, sin que nadie nos aplauda. 

El desierto de los Tártaros (1940), de Dino Buzzati. Título original: Il deserto dei Tartari. Traducido por Carlos Manzano. Prólogo de Jorge Luis Borges. 272 páginas. Yo he leído la edición publicada por Gadir en 2008.

¿Has leído El desierto de los Tártaros? ¿Conoces algún otro libro de Dino Buzzati? Si quieres comentar, hazlo aquí abajo o en Twitter: @jescolart ¡Gracias por leer y compartir esta recomendación!

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