Celebrar la vida y todos sus arañazos
Permanecer más de 160 minutos sentado en la butaca sin que se haga pesado. Y además salir del cine con una sonrisa y una sensación de alegría en el pecho. Los responsables de este logro son el director Richard Linklater y su magnífica película Boyhood, que narra la vida de un niño llamado Mason desde los 6 hasta los 18 años (y por extensión, la de su particular familia) en Texas.